Celo permanente

Para ser una buena corneadora, tienes que entrar en un estado de celo permanente cada vez que salgas de casa. Este estado de excitación sostenia, expectante a la llegada de cualquier macho atento, va a terminar por embriagarte y convertirse en tu forma de vida.

Sólo unas pocos consiguen, dentro tal estado, llegar al abandono total de pudor. Éstas son capaces de realizar cualquier acto provocativo matizándolo con un aire de descuido de sí mismas. En la imagen tienes a toda una campeona en un bar de amigos...

Haz como ella cuando salgas con tu marido, sobretodo si es con los compañeros del trabajo. El cornudo te lo agradecerá y los resultados serán siempre excelentes.