viernes, 21 de octubre de 2011

Escalada de atrevimiento



Hola Manolo,
Somos una pareja swinger que disfruta de situaciones morbosas, de aquellas a los que los locales de ambiente les aburren a veces porque todo está muy pautado y tiene que ser "correcto". Fue precisamente una noche que no nos apetecía ninguna pareja cuando se inició la escalada. Además, fue a mí a quien se le ocurrió la idea maliciosa, ella simplemente la ejecutó. Mi novia se dirigió a un grupo de tres chicos, de esos que se quedan en la barra en la zona de no parejas, y que esperan como locos que alguien les reclame. A decir verdad, todo ayudó, porque eran tres tios que acababan de entrar y tenían pinta de novatos, no eran los habituales de este tipo de sitios. Total, que entre queriendo provocar y queriendo satisfacer mis ganas de morbo/cuernos, ella se acercó a ellos, les saludó y se bajó las bragas. Les pregunto si se les ocurría alguna cosa entretenida, porque ella se aburría como una ostra. Ya te puedes imaginar cómo terminó, pero la gracia es como empezó, porque se pasó un buen rato largo hablando sin bragas con ellos, toqueteándola y, en fin, que cuando se la metieron la habían ya sobado a gusto y había sido el escándalo del local.
Repetimos el numerito en otros sitios de ambiente pero, con el tiempo, ya no le vimos el morbo. Y aquí fue cuando la escalada empezó de verdad. Ella se atrevió a hacerlo en una discoteca normal, en un rincón. Se puso entre la pared y dos chicos que estaban juntos y se bajó las bragas... ¡No veas! Uno se encargaba de tapar y el otro se abonaba a gusto, y luego se relevaban. Eso la puso a mil, porque otra gente la vio, y lo repetimos en otras discotecas, bares, fiestas, la verdad es que no nos cansamos de hacerlo.
Ahora ella me ha dicho que quiere seguir, que eso le encanta, pero que quiere darle una vuelta de tuerca: quiere hacerlo con conocidos, con amigos mios, del trabajo, etc.
A mí me excita la idea, no puedo evitarlo.

viernes, 7 de octubre de 2011

Novia excesivamente sumisa


Hola Manolo,
Soy un cornudo mirón, encantado de que mi novia me permita asistir al detalle a todos sus actos de corneamiento. Es casi como un deporte para ella, o no sabría decirte si una adicción (y también para mí, claro).
Lo que me sorprende, y por eso te escribo, es que mi chica es muy dominante conmigo, siempre follamos hablando de cómo soy su juguete y de las cosas malas que quiere hacerme. En cambio, cuando está con un extraño, se vuelve complaciente en extremo, y hace cosas que a mí nunca me ha hecho. Siempre se arrodilla y se desnuda para mamarla, por ejemplo, antes de que se lo pidan. Se pasa rato jugando con la polla, totalmente entregada, y cuando lo han follado, lo hace de nuevo: se arrodilla, quita el condón, y se pone a lamer lo que queda en el cipote hasta dejarlo limpio que brilla; es como si fuera una puta dedicada, vocacional, y el servicio incluyera una lavado de bajos.
¿Crees que eso es normal?
Fernando
-------------------->
Mira, colega: he corregido tu email, lo he puesto al estilo de mi blog, he buscado una foto ilustrativa, me he puesto como una mona, y ahora no voy a responderte lo que pienso porque me estoy haciendo una paja pensano en tu novia...
Siempre tuyo,
Manolo